GASTRONOMÍA

Febrero 2016: Casa López. (Villanueva del Ariscal – Sevilla).

Durante este mes de Febrero, es una buena época para visitar la «Ruta del Mosto» del Aljarafe sevillano, conocer sus pueblos, sus paisajes, sus monumentos, sus constumbres, su cultura y como no, sus buenos vinos, entre ellos el afrutado y fresco «Mosto», junto a sus extraordinrios vinos generosos (amontillados, olorosos, finos), todos ellos elaborados con la variedad autóctona de la Garría Fina, también con la Palomino y la Pedro Ximénez. Y en estos últimos años algunas de las bodegas de la zona como la de f. Salado están también elaborando unos deliciosos vinos tintos.

Y por supueso dentro de esta ruta «mostovita» se encuentra una extraordinria y variada gastronomía, fácil de encontrar en sus diversos establecimientos como bares, tabernas y restaurantes.

En uno de esa treinta de pueblos que componen la comarca del Aljarafe: Villanueva del Ariscal, que entre otras cosas, cuenta con una larga historia vitivinícola, como así lo atestigua una de las bodegas mas antigua de España que se encuentra en el interior de dicho pueblo: Bodegas Góngora, fundadas en 1682.

Pues bien, de nuevo Apoloybaco estuvimos recorriendo sus calles, plazas y sus bares y tabernas para comprobar las características y bondades del mosto de este año 2015, la climatología no ha acompañado, poco frío y poca lluvia, con lo cual el mosto que ha fermentado en los bocoyes se han resentido de estos factores tan negativos.

Y a la hora de comer elegimos uno de los restaurantes de Villanueva del Ariscal que en estos últimos años ha sabido ganarse un reconocido prestigio, y que os queremos recomendar para este mes de febrero:

Casa López; inaugurado en el año 2002 por el matrimonio formado por Isabel Limón ( centro de la foto) y José López, del que toma su nombre, son oriundos de Villanueva y grandes conocedores de sus gentes y constumbres, en este sentido su establecimiento es un participante muy activo en las jornadas anuales de la tapa y el mosto que se celebra anualmente en el pueblo, en la última edición lo hicieron con la elaboración de 800 tostás con huevo, es un delicioso desayuno muy fácil de elaborar y netamente ariscaleño. Se realiza con pan de «boba» hecho calas y tostado. Se frota la parte dorada con un ajo y se rocía generosamente con buen aceite de oliva y un punto de sal.

Casa López, es uno de esos rincones gastronómicos de la provincia de Sevilla que los amantes al buen yantar y mejor beber no se pueden perder. Uno de sus primeros atributos es el trato de hospitalidad y amabilidad de sus propiestarios (José, en la foto el segundo por la derecha) y su esposa Isabel, trato que además lo «adoban» con una gran profesionalidad, que pronto se hace notar en el servicio que ofrecen.

El restaurante se conforma con un amplio y confortable salón a la entrada del local, junto a una peueña barra, donde en caaso de tener que esperar algunos minutos, estos se hacen mas agradables degustando un buen vino o una refrescante cervecita. El salón tiene unos techos muy altos que asemejan una torre, para los meses de estío viene muy bien pues amortigua el calor, su decoración aparte de elementos cerámicos cuenta con algún que otro artilugio  de épocas pasadas, en él se distribuyen las mesas y sillas, nada suntuoso pero muy comodo y familiar.

En el interior cuenta con un patio adaptado a los fumadores, ya que esta abierto con sus correspondientes mesas y sillas y calentadores para los meses mas fríos. Y a la entrada dispone de una terraza que en otoño y primavera, como decimos por el sur; se esta de lujo, por supuesto siempre que no llueva.

Casa López ofrece una cocina tradicional y de la comarca con toques innovadores que le aportan destellos de modernidad ampliando la gama de colores, aromas y sabores de sus platos.

La materia prima, forma parte también de su «secreto» culinario, es principalmente de temporada y de los productos que da la zona, aunque no les duelen prendas si hay que desplazarse al cercano Portugal para adquirir por ejemplo su espléndido bacalao seco.

Aunque su carta no es muy amplia, si es variada y mustra la esencia de esa mágica combinación de modernidad y tradición que caracteriza a este aljarafeño restaurante.

En un breve espacio de tiempo hemos cursado dos visitas a Casa López, la primera un grupo de socios de apoloybaco, que como ya es habitual nuestro amigo Juan Manuel de la Fuente (primero por la izquierda) se encarga de hacer el reportaje fotográfico y una segunda ocasión con algunos miembros de la Junta directiva de Apoloybaco. Las dos visitas fueron un auténtico éxito.

Con el objeto de poder degustar el máximo de propuestas culinarias, es muy recomendable, si hay coincidencia gastronómica entre los comensales, pedir distintos platos al centro de la mesa y así compartir entre todos.

Los panes de la casa son una buena opción para ir empezando, entre ellos destacan el de Bacalao, el de la Carne Mecha y paté y uno muy peculiar: Chorizo con leche condensada, aunque cuentan con otros panes de la casa como el de queso de cabra y miel y otros mas tradicionales como el de jamón o el de anchoas.

Después tenemos como unas 18 o 20 propuestas diferentes en la carta, nosotros nos inclinamos por probar el Tartar de Salchichón, muy suave y gustoso, también el Choco al pan frito, un guiso muy bien conseguido por su textura y sabor. No se puede dejar de probar su exquisita «Pucherá», otro de los guisos que identifican a Casa López. Y la Carrillá con corazón de alcaucil fue otro de los platos que probamos, un guiso innovador que combina la potencia de la carne con la suavidad del alcaucil. Así como la Carne con tomate, muy sabrosa y equilibrada pues el tomate es natural.

Otros platos, que aunque no probamos estan muy recomendados por los propietarios y por algunos de los clientes con los que hablamos, son el Bacalao ajoarriero, las Albondigas de choco y gambas, el Atún encebollado y las albondigas morunas. También ofrecen en la carta; la Ensaladilla de marisco, los Riñones al Jerez, el Timbal de Salmón, el Solomillo al ajo y las manitas de cerdo.

Casa López cuenta también con una nutrida bodega, vinos de distintas denominaciones de origen españolas, pero sobre todo tiene vinos de la comarca, por supuesto el mosto que es de Bodegas Loreto y vinos de la provincia de Sevilla como el tinto de Constantina Zancúo de Bodegas La Margaita y el tinto roble de Colonias de Galeón de Cazalla de la Sierra. Todo un acierto contar con los vinos que se elaboran en la provincia y que son de una extraordinaria calidad.

Y un bético como yo no podía terminar este reportaje sin enseñaros la foto que nos mostro su propietaria Isabel, lo siento por mis amigos sevillistas.

Dirección: C/ Torre del Molino, 1.

Comparte