GASTRONOMÍA

Enero 2014: Taberna der Guerrita. (Sanlúcar de Barrameda).

TABERNA DER GUERRITA

11540-SANLÚCAR DE BARRAMEDA

Calle San Salvador 34, esquina Calle Rubiños. Tél.: 697 826 096

 Relación calidad-precio:

Presentación:  

Cocina:

Servicio:

Mala   Aceptable   Buena   Muy Buena   Excelente.

 

Escondida desde 1978 en el popular Barrio Bajo de Sanlucar de Barrameda, hay uno de esos templos enológicos y gastronómicos al que es necesario acudir al menos una vez en la vida. La Taberna der Guerrita es una autentica gozada para los sentidos y al frente de esa «Sacristía del Marco de Jerez», está Armando Guerra Monge, hijo de arrumbadores sanluqueños y que desde pequeño, cuando su padre, Manuel Guerra Rodríguez «Guerrita» ejercía la profesión en las Bodegas de Delgado Zuleta, supo que lo suyo era el mundo de los vinos generosos de Andalucía. La Taberna der Guerrita, es efectivamente una taberna, pero también muchas cosas más: Enoteca, trastienda de exposiciones y actividades, sala de catas y por supuesto, restaurante. Uno de los mejores que hemos visitado últimamente.

La Huelga del Marco de Jerez de 1970 fue un hecho decisivo en la vida de muchos jornaleros del campo y a la familia de Armando le cambió la vida. Fueron cerca de 140 días sin jornales y eso hizo que su padre, Manuel Guerra Rodríguez, junto con su esposa Mercedes Monge, decidieran en 1978 abrir su propio negocio de vinos, dejando atrás su profesión de arrumbador en las Bodegas Delgado Zuleta. Así nació la Taberna der Guerrita en el corazón del Barrio Bajo de Sanlúcar de Barrameda y que desde 2011 dirige su actual propietario, Armando Guerra Monge.

El negocio desde entonces dio un paso más y cuando cumplió los 30 años de vida, Armando tomó una decisión trascendental para entender el actual negocio de la Taberna. Incorporó a la taberna una tienda de vinos, que bautizada como «La Sacristía del Marco de Jerez», le añadió una moderna y perfectamente equipada sala de catas de la que se hace cargo Armando, un joven emprendedor, que tenía y tiene, una magnifica formación académica y profesional producto de sus años de estudios en viticultura y enología en Madrid.

El complemento perfecto de Armando al frente del local, es su hermano Quino, quien desde los fogones tiene la enorme responsabilidad y sabiduría, para conseguir que el maridaje entre vinos y viandas, sean perfecto. El establecimiento cuenta con una amplia barra clásica de taberna sanluqueña a la entrada, en la que varias mesas de maderas permiten disfrutar con tranquilidad a sus clientes de sus generosos y espléndidos caldos. Un pequeño corredor separa el salón de la trastienda, un espacio soberbio que te transporta a otra dimensión enológica.

Unos bonitos y elegantes anaqueles se desparraman por las paredes conteniendo autenticas joyas enológicas de los vinos generosos de Jerez. Botellas de colección con etiquetas añejas comparten estantería con otros caldos de otras Denominaciones de Origen y un poco más allá, la formidable sala de catas y la espectacular bodega de la Taberna, autentico cofre que guarda, en forma de botellas de vinos, algunos de los tesoros enológicos más importantes de Andalucía.

Es en ese espacio donde Armando se encuentra a sus anchas. Desde que amplió la taberna, Armando se esfuerza y dedica casi todo su tiempo a mostrar al visitante lo mucho que da de sí los excelentes caldos generosos del Marco de Jerez (Puerto de Santa María, Sanlucar de Barrameda y Jerez de la Frontera) y para tal fin, organiza un calendario anual de catas en la que siempre están presentes profesionales o personalidades importantes del sector vinícola. Una iniciativa con la que Armando Guerra se encuentra particularmente satisfecho, es con el programa de catas «Cata para quien no le gusta el vino». Una autentica experiencia para quién se acerca a disfrutarla.

Ese espacio enológico que es la «Taberna del Guerrita», estaría incompleto si no estuviese acompañado de unas extraordinarias viandas que salen de los fogones de Quino y que llegan a la mesa en perfecta armonía. Comer en los reservados de la Taberna der Guerrita, es una experiencia inolvidable. Con capacidad de hasta 30 comensales, se pueden degustar unos magníficos entrantes a base de chacinitas de Benaoján, quesos de El Bosque, una ensalada de tomates de La Colonia con queso de cabra, el frito de por allí, almejas a la marinera con un puntito de crianza oxidativa, la mojama barbateña, setas salteadas, filetes de atún vuelta y vuelta y algunos guisos caseros según la temporada.

Sin lugar a duda alguna, La Taberna der Guerrita es un atractivo más de la bella localidad de Sanlúcar de Barrameda y quienes la visiten podrán comprobar que más allá de Bajo Guía, o de la popular y concurrida Plaza del Cabildo, existen otras ofertas culinarias y enológicas que tienen como mínimo la misma calidad que los grandes y populares establecimientos conocidos de la ciudad. Si van repetirán seguro.

 

Comparte