GASTRONOMÍA

Restaurante del mes. Julio 2022: Casa Palacios (Sevilla).

CASA PALACIOS (SEVILLA).

C/Calle Porvenir, 4 esquina a Progreso. 41013 Sevilla.

Horario de apertura:

De lunes a viernes: 9:00–15:30, 20:00–23:00.
Sábados 10:00–15:00.
Domingo Cerrado.

Teléfono: 954 231 132.

Web: Casa Palacios

RCP:

Presentación: 

Cocina: No tiene.

Servicio: 

Mala Aceptable Buena Muy Buena Excelente

Seguimos, un mes más, en el barrio del Porvenir, ese barrio sevillano nacido al calor de la Exposición Iberoamericana de 1929, y que guarda entre sus calles ajardinadas y soleadas, algunos templos culinarios de gran solera, y que, afortunadamente, han sobrevivido al paso del tiempo. Es el caso del establecimiento que recomendamos en este mes de junio de 2022, y que se llama «Casa  Palacios». Alejado del mundanal ruido del casco histórico de Sevilla, a la varita misma del Parque de María Luisa, pulmón verde de la ciudad, Casa Palacios abrió sus puertas como tienda de ultramarinos en 1926, y ya en 1931, despachaba vinos como bodega, y por lo tanto, es el establecimiento más antiguo que existe abierto en la Zona Sur de Sevilla, y el tercero más antiguo de la capital andaluza, solo por detrás de la Taberna «Las escobas», y «El Rinconcillo”, ambos en el centro de la ciudad.

A Casa Palacios se va, de toda la vida, a comer sus excelentes chacinas, viandas, encurtidos, conservas, salazones y demás viandas propias de una tienda de ultramarinos finos clásica; pero sin duda, la estrella de la casa es su extraordinario jamón ibérico de bellota, cortado insitu, y dispuesto sobre un elegante papel parafinado con el logo de la casa.  En sus inicios, (principios del siglo XX), el jamón de Casa Palacios era el de mas fama de Sevilla, y llegó a ser, en tiempos de Isabel II, la reina madre de Alfonso II, proveedor real.

Casa Palacios, fue fundada en 1926 por D. Blas Palacios, un soriano del municipio de Taniñé, —hoy prácticamente despoblado—, que ya contaba con cierta experiencia en el sector y se aventuró a abrir este negocio de ultramarinos finos y bar, en los años previos de la gran exposición del 29 que tanto significó para toda la ciudad.

Años después, en 1948, los también sorianos D. Juan Palacios y D. Severo Palacios Pérez, ya con hondas raíces sevillanas, (Juan era el socio numero 7 del Real Betis Balompié, y la esposa del fundador, Don Blas Palacios,  llego a ostentar el socio número 1 del Sevilla Fútbol Club,) continúan con la actividad de Casa Palacios.

En el año 1983, toma el testigo de Casa Palacios, D. Juan Manuel Pérez Fernández, aunque el gerente actual es su hijo, Juan Manuel Pérez Escobar, un joven sevillano, aficionado al rugby —llegó a ser jugador profesional—, y continuador de mantener la esencia de un negocio con el arraigo y la solera de Casa Palacios. En la actualidad, padre e hijo, antiguo y actual Gerente, mantienen el local casi intacto, con el aire decadente del vecindario que en las tardes de canícula trasmina una marea a dama de noche y jazmín, procedentes del vecino Parque de María Luisa. Sus propietarios presumen de una larga trayectoria marcada por la formalidad y honestidad que han situado a esta casa entre los establecimientos mejor referenciados en la historia reciente de la ciudad.

Casa Palacios no es solo una taberna, ni una tienda de ultramarinos; Casa Palacios es un museo de la Sevilla que se fue, postal viva de los montañeses afincados en nuestra ciudad y testigo de excepción de su extraordinario y señero mobiliario. En la atractiva decoración estética de Casa Palacios, brilla con gran esplendor, la majestuosa barra colonial del mostrador, hecha de ricos artesonados de madera de caoba procedente de lo que fue el Pabellón de Cuba en la Exposición Iberoamericana, y sus ricas y preciosas estanterías y alacenas de madera noble, también contribuyen a darle solera y clase a este singular establecimiento. En su interior se mezclan los clientes que acuden al establecimiento en busca de viandas, vinagres o ultramarinos, con los que acuden a su barra de bar para catar su extraordinario jamón.

Todo en Casa Palacio tiene un sabor extraordinario. Degustar una ración de jamón cortado en finísimas lonchas servido en el papel es una experiencia única. El jamón de Casa Palacios sigue siendo, a pesar de la proliferación de establecimientos que hay en Sevilla donde se sirve el jamón de Huelva, un autentico placer.  Acompañar ese jamón con un tinto Valdepeñas, puede convertirse en un autentico deleite.

Además, Casa Palacios ha tenido la feliz idea de embotellar con etiqueta propia, el vino de Valdepeñas que se consume en el bar desde sus inicios, con la idea de que sus clientes puedan llevarse a casa tanto el jamón, en lonchas o en taquitos, como el vino que los armoniza. Una pizarra a la antigua usanza señala con tiza otras especialidades de la casa formada, lógicamente, por las chacinas que se venden en la contigua tienda.

En resumen queridos amigos, salgan de la habitual zona gastronómica de confort de la Sevilla gastronómica, y visiten este emblemático establecimiento, y siempre concurrido por los vecinos del barrio, y prueben esas excelentes viandas, y ese sensacional jamón ibérico, uno de los manjares más solicitados por los lugareños. Y, por supuesto, acompañen a esas chacinas, con algunos de los magníficos vinos generosos que se sirven en el establecimiento, o, si lo prefieren, pidan el papelón de chacinas o conservas, con un buen y frío botellín de la Cruz del campo. Una pareja de baile perfecta.

 

 

 

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