No queriamos dejar pasar el año sin dedicarle un vino como un pequeño homenaje al cumplimiento del bicentenario del Museo del Padro de Madrid. El Real Museo de Pintura y Escultura, que en 1868 pasó a denominarse Museo Nacional de Pintura y Escultura y posteriormente Museo Nacional del Prado, abrió al público el 19 de noviembre de 1819 con 311 pinturas de la Colección Real, todas de autores españoles, colgadas en sus muros. En este mes de noviembre de 2019 se celebrará por tanto su Bicentenario
El Museo Nacional del Prado, es uno de los más importantes del mundo, así como uno de los más visitados – cerca de tres millones de viitantes en el 2018- rico en cuadros de maestros europeos de los siglos XVI al XIX, según el historiador del arte e hispanista Jonathan Brown «pocos se atreverían a poner en duda que es el museo más importante del mundo en pintura europea». El inventario de bienes artísticos comprende más de 35 000 objetos, desglosados en 8045 pinturas, 9561 dibujos, 5973 estampas y 34 matrices de estampación, 971 esculturas (además de 154 fragmentos), 1189 piezas de artes decorativas, 38 armas y armaduras, 2155 medallas y monedas, por encima de 15 000 fotografías, 4 libros y 155 mapas.
Y una de esas joyas pictóricas es este cuadro de Velázquez «Los borrachos o el Triunfo de Baco», perfecto para ilustrar la otra joya, en este caso vinícola que os recomendamos para este mes de noviembre, un cava que al igual que esta pintura baquica, está cargado de naturalidad, de expresividad, cargado de infinidad de matices, es sobre todo una pintura genuina. El pintor sevillano Diego Velázquez aplicó toda su sabiduría en este lienzo, al igual que la Bodega Recaredo ha aplicado todo su saber hacer en este sorprendente cava.
> Recaredo Turó d’en Mota 2006; La filosofía de una de las grandes bodegas elaboradoras de cavas en nuestro País,la bodega Caves Recaredo, queda reflejada en este extraordinario espumoso Turó de’n Mota. Su objetivo: elaborar un cava de terroir, un cava que refleja una tierra única, con sus características y limitaciones. Un cava Gran Reserva de una única variedad de una sola añada y un solo viñedo. El viñedo se encuentra en una pequeña colina, Turó d’en Mota, una hectárea de Xarel·lo plantado el año 1940.
La vendimia se realizó de forma manual. La primera fermentación se realizó en barricas donde el mosto reposó con sus lías durante unas dos semanas con bâttonages periódicos. Una vez embotellado, el cava Recaredo Turo d’en Mota 2006 reposa un mínimo de 120 meses en la oscuridad de la bodega. La exclusividad de este cava del Penedès queda reflejada en las tan sólo 4.864 botellas que se han elaborado, todas ellas numeradas y con la fecha de degüelle indicada en la etiqueta. No se le añade licor de expedición.
Debido a la larga crianza de este cava, recomendamos abrirlo unos 20-30 minutos antes de servir. Con larga vida en la botella, podremos degustar este gran cava Brut Nature Gran Reserva durante los próximos 10 años, hasta el año 2028, siempre que esté guardado en buenas condiciones (15ºC).
Recaredo Turó d’en Mota 2006; El comité de cata de Apoloybaco, tuvimos la ocasión de catárlo hace pocos días en una de nuestras catas mensuales, en esta ocasión organizada por nuestro amigo Salvador Morgado, miembro fundador de este comité. Y todos los asistentes coincidimos en que era uno de los mejores espumosos que habiamos catado en nuestro grupo desde hace mas de tres años que esta en funcionamiento, otorgándoles una nota media de 9,4 puntos sobre 10.
Recaredo Turó d’en Mota 2006; Presenta un color dorado brillante, de burbujas finas y persistentes. En nariz es complejo e intenso, después de tanto tiempo de crianza. Es floral y herbáceo (hierbas de tocador), de claros aromas de frutos secos y fruta macerada, destacando los aroms cítricos. Se nota su tiempo de crianza en los toques especiados y suaves tostados, muy expresivo. De boca potente, equilibrado y sabroso, buena acidez y muy bien integrado el carbónico, al final muestra un fino amargor. Un cava de largo recorrido en boca. Muy persistente y prolongado, con un gran postgusto tostado. Un cava muy seductor.
Bodegas Cava Recaredo; En 1924 Josep Mata Capellades se inicia en el mundo del vino espumoso como maestro del degüelle y elaborador profesional. A pico y pala, empieza la construcción de las cavas justo debajo de su casa, en el centro histórico de Sant Sadurní d’Anoia (Barcelona). Josep Mata Capellades tomará como referencia el nombre de su padre –Recaredo Mata Figueres, nacido en 1878 en el seno de una familia de artesanos ceramistas– para dar nombre a una casa familiar de referencia que, con el paso del tiempo, forjará el camino de un estilo propio.
Con su esfuerzo y dedicación, la casa Recaredo –conocida familiarmente como Can Credo – se especializa en cavas verdaderamente de terroir con el viñedo como elemento esencial y la clara voluntad de elaborar espumosos de larga crianza capaces de conectar de manera honesta con los paisajes del Alt Penedès. Recaredo será el primer viticultor de la región vitivinícola del Penedès en certificarse en agricultura biodinámica por Demeter a partir de 2010.
2010 será también una fecha remarcable porque Recaredo se especializa en la elaboración únicamente de vinos espumosos con una crianza mínima de 30 meses. Será a partir del 1 de agosto de 2010 cuando todas las botellas comercializadas de Recaredo saldrán a la venta con una cuidada crianza mínima de dos años y medio como sello inconfundible de la bodega familiar. Recaredo es escogida “Mejor Bodega de Catalunya 2017” por la Asociación Catalana de Sumilleres (ACS). El galardón destacar el “obsesivo mimo y atención en los detalles, tanto en viñedo como en bodega” de las cavas, aparte de valorar la voluntad de querer “mantener intacto, generación tras generación, el compromiso de elaborar vinos de terruño que muestren el paisaje del Penedès, primando el oficio y la artesanía y adquiriendo niveles de máxima calidad”.