Tapear y comer, en los pueblos de Sevilla: Almacén de la Plata.

Nombre	Domicilio
Bar Antonino.	Calle Antonio Machado, 31.
La Muralla.	Plaza del Pilar, 6.
El Romeral.	Calle Antonio Machado, 57.
El Molino.	Plaza del Pilar, 1.
La Tinaja.	Calle Granadinas.
La Morena.	Plaza de la Palmera, 11.

Mala   Aceptable   Buena   Muy Buena   Excelente

Almadén de la Plata se encuentra situado en el cuadrante noroccidental de la Sierra Norte de Sevilla. Esta comarca está delimitada por las provincias de Córdoba, Huelva y Badajoz. La población se encuentra a una altitud de 450 m y su término municipal tiene una extensión de 256 Km2, con una población censada de 1.319 habitantes. (2018). Su término fue poblado desde tiempos prehistóricos, ya que se han encontrado restos arqueológicos del Neolítico final (4.000 a. n. e.)[1], en dos yacimientos muy importante, situados en la Cueva de los Covachos y en Risco Nogal. Durante el calcolítico (3000-2000 a. n. e.)*, el término municipal experimentó una eclosión poblacional importante, ya que se han localizado un total de 20 megalitos en tres necrópolis: Grupo de Palacio, Grupo de Cañalazarza y Grupo del Membrillo.

Del Bronce antiguo (1700-1500 a. n. e.) es la necrópolis musealizada de la Traviesa. Se descubrieron recientemente dos estelas tartésicas, que datan de un período comprendido entre el final de la Edad del Bronce y el principio de la Edad del Hierro. No se puede discernir si las estelas corresponden al período pretartésico (1000-850 a.n.e.) o al tartésico (850-550 a. n. e.). Estas estelas, junto con un enterramiento de cremación en fosa excavada en el complejo megalítico Tholos Palacio III, es el único registro arqueológico tangible para realizar especulaciones sobre la sociedad indígena, autóctona, antes de la entrada en la Historia. Los orígenes de esta localidad datan de la época romana, cuya principal fuente de riqueza, procedía del laboreo de canteras de mármol, denominada “Pagus Marmorarius”, que traducido del latín significa aldea de lo mármoles. También había laboreo de minas de hierro, cobre y plata, tal como se atestigua con las muestras de escorias y minerales que se han detectado en los yacimientos arqueológicos romanos localizados en el término. Abundantes e importantes son los yacimientos de época romana, localizados en el término municipal, y que en el caso de Almadén de la Plata, son bastante numerosos, debido a que no en vano, por su término discurren hasta tres ramales distintos en el tiempo de la famosa Vía de la Plata, a lo que se une la existencia de canteras de mármol, de muy buena calidad, que se comercializaron en gran parte del imperio romano, y la presencia de minas de cobre, plomo, hierro y plata, no muy ricas, pero si muy numerosas, debido a la geología de fallas con intrusiones magmáticas característica del término de Almadén.

En época musulmana, el asentamiento romano adquirió la denominación de “Almedín balat” (las minas de la calzada), nombre que define claramente que el principal potencial de ese núcleo rural, era la existencia de minas, ubicadas junto a la calzada de la plata, por consiguiente, Almadén de la Plata debe su nombre a la importancia de sus antiguas minas, en especial de mármol y argentíferas. Su núcleo urbano posee la forma de los típicos pueblos mineros, con casas alineadas en calles rectilíneas. Durante el período de Al-Ándalus (711-1248), la tónica sigue siendo la misma que en las etapas anteriores, Almadén de la Plata adquiere gran importancia por los yacimientos de plata, cobre y mármoles. Su actual nombre proviene del árabe “Al- Medin Balat”, que significa las Minas de la Calzada. Bajo la época árabe, se fortificó como avanzada y defensa de Sevilla.

Los Caballeros de la Orden de Santiago conquistan Al-Medín Balat a los musulmanes. Tras la reconquista, Fernando III de Castilla le concedió Carta Puebla y el derecho a tener un escudo propio con el castillo y el león de las armas reales. Los Reyes Católicos otorgaron a la villa el título de Leal, por la ayuda y el comportamiento tan valeroso de muchos de sus habitantes que participaron en la conquista de Granada. Durante la Guerra de la Independencia, tiene gran relevancia de nuevo, la participación de muchos voluntarios melojeros en la batalla de Bailén, a las órdenes del General Castaños, logrando vencer a las tropas francesas, en la que fue la primera derrota del ejército de Napoleón. Por si os coge de mano, nuestros socios nos recomiendan estos establecimientos gastronómicos en Almadén de la Plata.