Tony Bennet, es el mejor cantante del mundo. (Frank Sinatra).
Casi a punto de cumplir los 97 años, los teletipos anunciaban el fallecimiento el pasado 23 de julio en su residencia de Manhattan (New YorkI), del cantante Tony Bennett. Considerado por toda la critica como el último de los grandes «crooner» del siglo XX, Tony Bennett se dio a conocer como un especialista en baladas muy influenciado por el cantante negro, Billy Eckstine, pero a diferencia de este, Bennett fue moldeando su estilo con una calidez intimista sin parangón en el canto jazzístico.
Comparado siempre con Frank Sinatra, quién declaró en una ocasión, que Bennett era el mejor cantante del mundo, le diferenciaba de este, una voz aparentemente áspera en primera instancia, pero firmemente seductora a poco que desarrollaba la canción que interpretaba. Como pasaba con Billie Holiday, siempre surgía entre el aficionado y la critica especializada, la inevitable comparación entre ellos. La diferencia de edad entre Sinatra y Bennett, desplaza a este último de la época de las grandes orquestas de baile en la era del swing, aunque hay documentos sonoros y discográficos de Tony Bennett, cantando con Duke Ellington, Count Basie, Woody Herman o Stan Kenton.
A mediados de los años cuarenta, Bennett, que había nacido en la periferia de New York en 1926, tomaba lecciones de música en la famosa «Calle 52» al tiempo que trabajaba y actuaba en algunos clubes de jazz de la ciudad y cantaba en algunas emisoras de radio. Su oportunidad le llegó en 1949, cuando, actuando junto a Pearl Bailey en el Greenwich Village Im, conoció a Mitch Miller, por entonces el director artístico del Sello Columbia, que estaba esa noche en el club. Columbia le hizo un contrato de inmediato, y partir de ahí, Tony Bennett comenzaría, de manera exitosa, su carrera profesional.
Bennet tuvo al principio de su carrera, y seguramente por exigencias contractuales de Columbia, menos apego al canto jazzístico y su inclinación por la música popular norteamericana fue sus señas de identidad al principio de su carrera. Así llegaron algunos éxitos con canciones como: «Because Of You», que lideró las listas de éxitos en septiembre de 1951; «Cold Cold Heart», o las famosas canciones «Stranger In Paradise», o Cinnamon Siner». Todo cambio para Tonny Bennett, cuando en 1962 grabó la bellísima balada: «I Left My Heart in San Francisco», aupada casi inmediatamente con sus dos primeros Premios Grammys (a lo largo de su carrera, consiguió una veintena), y llevada a la fonoteca de la Biblioteca del Congreso de los EE.UU, como la grabación más importante de Tonny Bennett en sus 70 años ininterrumpidos de oficio discográfico.
La llegada de la música pop y el R&R, y la irrupción de grupos que colonizaron los gustos de la juventud en aquella época: «The Beatles», «The Rolling Stones», Elvis Presley, etc, lo llevaron durante un par de décadas al ostracismo, perdiendo el protagonismo musical de antaño. De hecho, Columbia le rescindió el contrato en 1972 y paradójicamente, liberado del corsé que Columbia le imponía, (le obligó a grabar un disco con versiones de The Beatles), y cansado de las imposiciones de las grandes casas discográficas, se decidió a fundar «Improv Records», su propio sello discográfico en el que Tony Bennett, esperaba dar rienda suelta a su forma de entender la música. En esas estaba cuando se produce el definitivo, y memorable, acercamiento de Tony Bennett al canto jazzístico que tanto admiraba de Frank Sinatra. Conoció al pianista, Bill Evans, y llegó a un acuerdo para grabar dos discos con él. Evans al piano y Bennett al canto.
Bennett y Evans, se juntaron durante cuatro días en junio de 1975 para grabar el primero de ellos, en un estudio de grabación de la Fantasy Records, y consiguieron grabar uno de los mejores álbumes de la carrera de ambos. Para Bennett, la grabación de este disco con Bill Evans, fue un punto de no retorno an su acercamiento al canto jazzístico; la definitiva consagración como uno de los grandes maestros del jazz vocal y, sobre todo, el reconocimiento de los aficionados al jazz en todo el mundo. Ya antes de grabar este disco con Bill Evans, Tony Bennett había colaborado con éxito con la orquesta de Count Basie en un par de álbumes, e incluso hizo un majestuoso debut en el célebre teatro Carnegie Hall de New York en 1962, y había grabado un excelente disco en homenaje a la música del compositor Richard Rodgers y el letrista Lorenz Hart en 1973. Pero fue su trabajo con Bill Evans quién le abrió la puerta del Olimpo del canto jazzístico.
«The Tony Bennett / Bill Evans álbum», el disco que recomendamos en este mes de agosto de 2023 en la sección de jazz de Apoloybaco, fue un mano a mano entre ambos músicos lleno de sensibilidad e intensidad mutua a cargo de dos maestros, cada uno en su estilo, de las baladas. Grabado para el sello «Fantasy» en junio de 1975, el álbum es un canto a la desnudez vocal por parte de Tony Evans, y al pianismo sereno, elegante del maestro, Bill Evans. Tony Bennett dejó dicho que había disfrutado como nunca en la grabación de ese álbum. El disco contiene canciones que ya había grabado Bennett con anterioridad, como «My Foolish Heart» o «Some Other Time», pero nunca de una manera tan sencilla y tan perfecta. Evans fue un excelente acompañante, usando su firme mano izquierda para mantener a su cantante centrado, pero listo, cada vez que terminaba la voz, para continuar con su interpretación característicamente lírica. Escuchar a Bennet cantar esa obra maestra de Bill Evans llamada «Waltz for Debby», es uno de los momentos cumbres del disco.
El tremendo éxito del disco, forzó una segunda parte de ese maravilloso encuentro entre Bennet y Evans. Fue grabado en 1976 y publicado por DRG, y el resultado fue casi tan bueno como la primera sesión. «Together Again» que así se tituló esta segunda grabación de Tony Bennett con Bill Evans, fue la confirmación de esa tremenda afinidad musical entre ambos artistas. Uno de los temas estrellas de ese segundo álbum, fue la composición de Thad Jones, titulada: «A Child is Born».
Tony Bennett, deja para la historia cerca de 70 álbumes de estudio, de los que vendió unos 50 millones de ejemplares, y un palmarés profesional extraordinario, en el que destacan sus 20 premios Grammy (entre ellos, el de reconocimiento a toda su trayectoria), y dos premios Emmy. Pero sobre todo, Tony Bennett consiguió un récord dificilísimo de igualar: estar presente, durante casi siete décadas consecutivas, en las listas de éxitos musicales de todo el mundo.
LOS MÚSICOS | LOS INSTRUMENTOS | FICHA TÉCNICA |
Tonny Bennett. | Voz. | Sello discográfico: Fantasy Records |
Bill Evans. | Piano. | Número de serie: OJCCD 439 2 |
Fecha de grabación: 1975. 10-13 junio. | ||
Lugar de grabación: Fantasy Studios. Berkeley California. | ||
Calificación: 5* sobre 5 |
Temas |
Duración |
Young and Foolish. | 3:50 |
The Touch of Your Lips. | 3:54 |
Some Other Time | 4:40 |
When in Rome. | 2:53 |
We’ll be Together Again. | 4:36 |
My Foolish Heart. | 4:47 |
Waltz for Debby. | 4:02 |
But Beautiful. | 3:34 |
Days of Wine and Roses. | 2:20 |
OTROS DISCOS RECOMENDADOS DE TONY BENNETT
COUNT BASIE SWINGS/TONY BENNETT SINGS |
TONY BENNET AT CARNEGIE HALL |
PERFECTLY FRANK |
Publicado en 1959 para el sello Roulette, esta colaboración coincide con un periodo de fertilidad musical de la gran orquesta de Count Basie, probablemente una de las tres grandes big bands de todos los tiempos. Con una sección rítmica fantástica, una poderosa sección de metales, y los estupendos arreglos de Neal Hefti, el álbum es absolutamente recomendable. |
Tony Bennet consiguió de la mano de Ralph Sharon, uno de sus mejores momentos como cantantes. Este concierto en el Carnegie Hall (La primera vez que el cantante pisaba en 1962 tan consagrado escenario) sirvió para ademas de grabar un memorable disco, demostrar que el no era sólo un cantante romántico, sino todo un gran cantante de jazz. Imprescindible en su discografía. |
Homenaje sincero de Tonny Bennett a su admirado Frank Sinatra. El disco obtuvo un merecido Premio Grammy y probablemente estemos ante uno de los homenajes mas interesantes, musicalmente, hecho al maestro Francis Albert Sinatra. Este álbum aparece incluido en las revistas especializadas como uno de los mejores discos de jazz vocal. |
OTROS DISCOS RECOMENDADOS DE BILL EVANS
EVERYBBODY DIGS BILL EVANS |
WALTZ FOR DEBBY |
SUNDAY AT THE VILLAGE VANGUARD |
El segundo disco del pianista con el sello Riverside, fue su primer gran disco tanto de critica como de ventas. En él, Bill Evans, vira hacia un planteamiento mas jovial y expansivo, elección que se debe fundamentalmente a la elección de los acompañantes, en este caso dos puntales de la rítmica hardbop: Sam Jones al contrabajo, el saxofonista, Cannonball Adderley, y el inquieto, Philly Joe Jones. |
«Waltz for Debby» es un álbum, que responde fielmente al estilo que el pianista propuso desde el principio de su carrera. Fuertes dosis de romanticismo pianístico altamente sofisticado, y siempre ensayando nuevas combinaciones armónicas inspiradas a veces por la música de los impresionistas europeos. El timbre aterciopelado de su música hace que su estilo sea identificable casi al momento. |
El trio de Bill Evans con Scott Lafaro y Paul Motian, grabó cuatro discos de una calidad muy homogénea. En todos, el trio creó la moderna formula del piano/trio en jazz y consigue que se viva una de las experiencias mas gozosas para un aficionado al jazz: El aire de libertad, las sinuosas lineas del bajo y el fraseo ágil del pianista son todavía hoy insuperables. Unas grabaciones memorables. |
Disfruten del verano y de la música, amigos.
Más información sobre Tony Bennett, en Apoloybaco.
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