RESTAURANTE BARRA BAJA (SEVILLA).
Calle Javier Lasso de la Vega número 14. 41002. Sevilla
Teléfono: 955 055 660
Horario de apertura:
De Miércoles a Domingo. Cierran, lunes y martes.
Almuerzos: 13:30 a 16:00 h / Cenas: 20:30 h a 23:30 h
RCP: 
Presentación:
Cocina:
Servicio:
Mala Aceptable Buena Muy Buena Excelente
Barra Baja es un pequeño y acogedor restaurante ubicado en el centro de Sevilla, y que dirigen, desde hace ahora 5 años, el cocinero sevillano, Rafael Liñán y la cocinera badalonesa, Patricia Moliner. Liñán se formó en la Escuela de Cocina Heineken de Sevilla, mientras que Patricia Moliner se formó en el Campus de Turismo, Hotelería y Gastronomía de Barcelona. Ambos han conseguido, en muy poco tiempo, situar a Barra Baja en una opción muy seria y muy atractiva entre la amplísima nómina de restaurantes en Sevilla. Abierto desde el 11 de octubre de 2019, la casa propone y apuesta, principalmente, por un creativo concepto, por el cual los comensales pueden sentarse a pie de cocina, y degustar sus exquisiteces viendo, en primerísima fila, como se gestionan los fogones.
El restaurante, coqueto, elegante y confortable al mismo tiempo, dispone de dos espacios distintos e independientes; uno, el ya citado de «barra baja» (de ahí su nombre), frente a la cocina, con capacidad para 8 comensales; el segundo, más tradicional, son las mesas, que se distribuyen en el salón, bien distribuidas, clásicas, y con la adecuada separación entre ellas, para que los comensales (hasta 30), puedan disfrutar de la necesaria privacidad y de una espera o sobremesa relajada.
La propuesta gastronómica en carta de «Barra Baja», es concisa, pero diversa; no demasiado extensa, pero adecuada a sus espacios, y cuidan, sobre todas las cosas, la calidad del producto. La presentación de sus platos y elaboraciones, están exentas de florituras, aunque tampoco pecan de minimalistas. Rafael Liñán y Patricia Moliner se esmeran en resaltar en el plato lo fundamental: sus ingredientes y el producto fresco de mercado. Entre los entrantes, destacan las ostras, que las preparan de tres formas diferentes; a la brasa, con vinagreta, y al natural, y un plato sencillo, pero perfectamente conseguido: el cogollo braseado con queso de cabra Payoya.
Por gentileza de la dirección, a la mesa llegaron un par de aperitivos que hizo la espera mas corta, como fueron, una sabrosa patata frita de feria, aderezada con una mayonesa de huevo frito, y unos pepinillos frescos perfectamente aliñados en su propio jugo. el pan que llega a la mesa al tiempo que los aperitivos, lo elabora la Panadería de Pablo Conesa, un panadero de Bollullos de la Mitación, con fábrica en el Polígono Pisa de Mairena del Aljarafe. Los picos, bastante originales, son del obrador D’Origen de Sevilla.
Nuestra apuesta en los entrantes para compartir, fueron dos opciones, en primer lugar una original, sabrosa y exquisita «Tortilla Vaga de Gamba Blanca», una receta que permanece en carta de «Barra Baja», prácticamente desde su apertura, y que sigue siendo muy solicitada por su clientela. Estupenda opción, y magnifica elaboración de un plato tradicional que aquí se presenta bajo el concepto de la receta desestructurada. Rica de verdad, hasta mojar pan.
Y la segunda opción para los entrantes fue una receta muy socorrida, pero que bien elaborada y mejor presentada, resulta muy apropiada para los amantes de las verduras: La alcachofa.
A la hora de elegir los platos principales, la carta de «Barra Baja» no da demasiadas opciones, aunque, el comensal no debe sentirse frustrado; en nuestra opinión, son suficientes para el contexto en el que se mueven; por un lado, en verdulería, además de las alcachofas ya citadas, ofrecen el sevillanísimo palto de tomate aliñao, almendra frita y mojama, el Puerro asado con vinagreta de yema, miel y portobellos, el Ajoblanco de piñones, y el Cogollo braseado con queso de cabra Payoya. Esta última elaboración, muy requerida por sus clientes.
En el apartado de Pescadería, además de las ya citadas ostras, «Barra Baja», presentan en carta las siguientes elaboraciones: la Vieira Meunière, la Anchoa 00 de Santoña, el Carpaccio de Cigalas, la Ensalada tibia de Langosta, la Burrata Caviar, el Crudo de Corvina con gazpachuelo frío, y finalmente, una de las elegidas por nosotros (éramos dos comensales), las Colitas de Rape emulsionadas sobre fondo de espinacas.
El segundo comensal se decantó por una receta de carne, aunque de estilo moderno, tanto en la presentación, como en su elaboración: Un estupendo Steak Tartar de vaca retinta del Bajo Guadalquivir y Tuétano. Magnífica elaboración, creativa presentación, y un producto, la carne retinta de nuestra comarca que precia de ser una de las mejores carnes de nuestra ganadería. El toque de presentarla sobre su tuétano, además de embellecer el plato, le dio una nueva dimensión a un plato, el Steak Tartar, que a veces puede pecar, de insípido. Esta elaboración de la vaca retinta, nos supo a gloria. Un gran plato, donde, nuevamente, el producto resalta sobre todas las cosas.
Las otras opciones de carta en el apartado de carnes, eran: Arroz meloso de pato, Mollejas de corazón de vaca glaseadas, Costillas de cerdo ibérico asadas, y Solomillo de vaca madurado (250g). Volveremos a probar algunas de estas exquisiteces.
Ninguno de los dos comensales probamos sus postres, aunque se nos ofrecían en su carta sugerentes y tentadoras opciones, como: Pan con chocolate y aceite de oliva virgen extra; Torrija caramelizada y sorbete de naranja; Limón helado, pistacho caramelizado y ganache de chocolate blanco y Piña Asada. Otra gran excusa para volver a «Barra Baja».
En el apartado de vinos, tampoco nos defraudó el Restaurante «Barra Baja», al contrario, fue una grata noticia constatar, que no fue casualidad, que esta casa haya sido seleccionada entre los 13 mejores restaurantes de la provincia de Sevilla con mejor carta de vinos, obteniendo el puesto número 10. La selección fue hecha por un grupo de 70 especialistas del sector gastronómico dentro de los «Premios Solera», que patrocina, el Consejo Regulador del Jerez y la Manzanilla, y que fueron entregados recientemente en nuestra ciudad. Por cierto, entre esos 70 especialistas del vino, estaba, D. Vicente Sanchís Belmonte, quien fuera, entre 2001 y 2023, el autor de la sección de vinos y enología de la extinta Asociación Apoloybaco.
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De su selecta y amplia carta de vinos, con profusa presencia de vinos generosos y andaluces, espumosos, blancos, rosados, tintos nacionales e internacionales y vinos de postre, a nuestra mesa llegaron, para armonizar las viandas, dos vinos distintos: Un excelente Amontillado para los aperitivos de una de las mejores bodegas jerezanas, como es, Cayetano del Pino, y «Fusco», de Bodegas Albamar en Galicia, un muy buen vino tinto de la D. O. Ribera Sacra con la monovarietal Mencía. Para los aficionados a la coctelería, es interesante reseñar, que «Barra Baja», ofrece también una carta de cócteles elaborados con jereces y que les ha diseñado José Hidalgo, el maestro coctelero del Hotel Mercer de Sevilla.
Resumiendo y para terminar esta reseña, «Barra Baja» es una apuesta segura si el comensal busca una cocina honrada, cercana, con acento en la calidad del producto, y con elaboraciones excelentemente preparadas y presentadas, propias de la llamada «alta cocina» que nos proponen estos dos jóvenes cocineros, Rafael Liñán y Patricia Moliner al frente de la gestión del restaurante.
Si quieren privacidad, utilicen las mesas de sala, si por el contrario quieren espectáculo, y disfrutar en primer plano de la cocina en vivo de «Barra Baja», no lo duden, elijan una de las ocho sillas dispuestas frente a la cocina. Se abrirá ante ustedes un escenario donde los protagonistas son los cocineros de «Barra Baja» manejando sus utensilios, avivando las brasas al carbón, o a los propietarios encandilando a sus comensales en la preparación de cada plato.
Nada más, amigas y amigos, nos despedimos hasta el año próximo, deseándoles que tengan unas Felices Fiestas de Navidad y Año Nuevo.