La noche de la primera luna llena del primer mes de primavera del año 33 de nuestra era, un afamado bodeguero, afincado en Jerusalén, de nombre Jesús de Nazaret, decidió invitar a sus mejores amigos, a una cena. 12 bodegueros, cuyas bodegas estaban esparcidas por toda la ecumene entonces conocida. Jesús conocedor de que ésta sería su Ultima Cena, les ofreció panes ázimos, verdura, cordero y por supuesto Vino.
Al empezar cogió un pedazo del pan y les dijo: Tomad y comed, esto es mi cuerpo. A continuación alzó su copa de vino y dijo: Bebed todos, esta es mi sangre. Y en verdad os pido: Haced esto en memoria mía.
Cuando bebieron, quedaron todos sorprendidos y uno de ellos, el más receloso, llamado Tomás, le preguntó: Jesús, este vino no es «cristiano» (esta expresión se usa figuradamente para definir los vinos aguados). ¿De dónde procede?. A lo que contesto: Lo ha traído nuestro amigo Santiago que lo cosecha, lo elabora y lo cría en los pagos y bodegas que posee en España en una zona que llaman RIOJA.
Desde entonces este hecho ha tenido muchas representaciones artísticas, una de las más originales es este cuadro realizado en 1955 por el genial pintor español Salvador Dalí, según el tema clásico de Leonardo da Vinci. Donde el espacio queda limitado por un dodecaedro.
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BODEGAS EN LA DENOMINACIÓN DE ORIGEN CALIFICADA RIOJA |
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