Para este mes de julio en el que son muy agradecidos de tomar los vinos frescos, los que se sirven a una temperatura no mayor de 12ºC, os vamos a recomendar un vino que cumple esas características y además es un vino que responde a una nueva clasificación o categoría nos referimos a la recien creada, dentro de la D.O. Cava, de «Paraje Calificado», Son la última incorporación a la familia Premium del cava, un paso adelante en la búsqueda de productos de alta gama. El Cava de Paraje Calificado es aquel cuyo origen es un área menor –Paraje- de la DO Cava, calificado como tal por sus singulares características edafológicas y climáticas. Además, tanto la producción de uva en la viña como la elaboración del vino base y el cava en la bodega deben cumplir un estricto y específico pliego de condiciones y la comprobación de todo ello sigue un protocolo riguroso por parte de los servicios técnicos del Consejo Regulador de la DO Cava.
Nosotros lo catamos por primera vez en nuestra última enogastronómica cata de Apoloybaco celebrada el pasado mes de junio en el restaurante A Banda y lo acompañamos de un rico arroz A Banda y unas anchoas sobre tostá de pan con tomate, un maridaje muy armonioso y prolijo en matices.
El proceso hasta la aprobación final de estos Cavas de Paraje Calificado ha sido largo y complejo. La propuesta aprobada por el Pleno del Consejo fue aceptada por el Ministerio y se incluyó en la Ley 6/2015. En Junio de 2016, Una vez publicado el Real Decreto que desarrolla sus requisitos, en marzo de 2017, se empezó a recibir la documentación definitiva de los parajes candidatos homologados por parte de las empresas con el asesoramiento y el control minucioso de los Servicios Técnicos del Consejo Regulador y posteriormente, una vez comprobada la bondad de los dossier y el examen organoléptico por un experto comité se enviaron al Ministerio para su aprobación y ratificación definitiva como los primeros Cavas de Paraje Calificados. El comité de cata específico para esta categoría está formado por:
Pedro Ballesteros MW // Lenka Sedlackova MW // Ferran Centelles // Guillermo Cruz // Joan Miquel Canals // Enric Vives // Ramon Francàs
Según el reglamento, los Cavas de Paraje Calificado tendrán que ser, como mínimo “brut”, esto es, tener una adición de azúcar como máximo de 12 gramos por litro, para no enturbiar la conexión que se les presume con el paraje al que representan. Por lo tanto, este tipo de cavas será, bien brut, bien extra brut o brut nature, una opción que implica como mucho tres gramos por litro de azúcar y que contempla también la no adición de este componente ajeno al vino (y al paraje). La edad mínima del viñedo que proporcione las uvas de los Cavas de Paraje tiene que ser de diez años, y aunque el reglamento exige que se vinifique en la propiedad, un requisito que asegura el control por la bodega del procedimiento, no es necesario que el viñedo sea propiedad de la bodega elaboradora. ¿Esto afecta algo a la calidad final del producto? No necesariamente, sobre todo porque hay controles adicionales, como la exigencia de trazabilidad de tres años (que garantiza que ese vino es de ese terreno) y una cata a ciegas cualitativa que realiza un jurado de profesionales y expertos.
> AA MIRGIN OPUS 2013, nuevo Cava de Paraje Calificado de la bodega Alta Alella y procedente del Paraje Vallcirera. VALLCIRERA, un paraje singular, de suelo de Sauló ácido y pobre, se encuentra en la comarca del Maresme, en el Parque Natural Serralada de Marina, a apenas dos kilómetros de la costa. Cuenta con unos viñedos ecológicos desde su plantación (1991), situados a 90 metros de altitud sobre el nivel del mar, una característica que acentúa su carácter mediterráneo.
AA MIRGIN OPUS de Paraje Calificado es un cava Brut Nature elaborado a partir de uvas ecológicas procedentes de dicho paraje: Chardonnay (60%) y Pansa Blanca (40%), que permiten un buen envejecimiento. La variedad Chardonnay fermenta en barricas de roble francés de segundo año y la Pansa Blanca en tanques pequeños. Tras cuatro meses se realiza el coupage al que se le aplica el método tradicional con una crianza mínima de 36 meses. Sale al mercado sin dosaje (Brut Nature) y recién degollado, lo que permite degustarlo en su momento óptimo de consumo.
AA MIRGIN OPUS 2013, preenta un bonito color amarillo pálido con reflejos dorados. Se caracteriza por sus aromas de fruta madura y flores con un fondo de fruta roja y nueces, a los que acompaña una marcada mineralidad y un carácter salino propio del paraje del que procede. El paso por boca está marcado por la untuosidad, con sabores a fruta madura y frutos secos que se combinan con una acidez y una burbuja muy bien integradas. El experto en champagne y espumosos Richard Juhlin afirma que es largo, sabroso y persistente: “la presencia de madera podría resultar fuerte, abrumadora y, en ocasiones, difícil de contrarrestar, pero aquí está magníficamente equilibrada porque la fruta es tan rica por sí sola que se integra de una forma realmente agradable” y añade que “ambos, madera y fruta, son agradables por separado, pero aquí juegan juntos.
AA MIRGIN OPUS 2013 ya ha cosechado sus primeros triunfos en las principales publicaciones especializadas, como el Anuario de Vinos El País, donde cuenta con 94 puntos, o la Guía Peñín, en la que ha sido calificado con 93 puntos. También ha obtenido la medalla de oro en el reputado certamen de vinos ecológicos Millésime Bio 2018.
La bodega se diseñó específicamente para microvinificaciones. Los depósitos pequeños permiten fermentar cada parcela por separado, permitiéndo recoger la uva en su punto óptimo de maduración, según cada parcela y variedad. Todos los vinos fermentan a temperatura controlada en depósitos de acero inoxidable o en barricas nuevas de roble francés o americano.
Todos los trasiegos se realizan por gravedad, evitando así el uso de bombas. Incluso los remontados diarios que se efectúan a lo largo de las maceraciones se llevan a cabo sin bombeos. Se decanta el vino en un contenedor de acero inoxidable colocado debajo del depósito y, con la ayuda de un toro, se vierte el vino por encima de las pieles por la parte superior del depósito. Las maceraciones de vino tinto se realizan mediante la técnica del sombrero sumergido, de esta manera, el sombrero de pieles y pulpa se mantiene por debajo del nivel del vino favoreciendo la extracción.
La duración de las maceraciones varía entre tres y cuatro semanas según cada variedad, parcela y añada. Los vinos tintos efectúan la fermentación maloláctica en barrica, un proceso que exige un poco más de vigilancia, pero que ofrece ventajas significativas en cuanto a la fijación de color y otros elementos polifenólicos. Los vinos blancos y vinos base para cava no realizan la fermentación maloláctica completa, para mantener el máximo de frescor. En el caso de los cavas, se provoca la segunda fermentación, que tendrá lugar en botella y se somete a una crianza en rima en nuestra bodega entre 20 y 60 meses. Salen a la venta acabados de degollar.